Motivaciones
¿Cuál es el perfil de la persona que se interesada en realizar la formación Gestalt?
Normalmente entre nuestros alumnos nos encontramos con personas que están vinculadas al mundo de la salud o de la educación. En común tienen que están preocupados por entender de donde proceden sus dificultades, superarlas y que en un grado u otro les puede apasionar en algún momento de su vida acompañar a otra persona a realizar este tipo de proceso.
¿Cómo te permite aprender la Gestalt a trabajar en individual y grupal?
La formación gestalt se realiza perteneciendo a un grupo, partiendo de un interés común, en principio, aprender a ser terapeuta. El grupo potencializa el desarrollo personal, ya que cada miembro con sus aportaciones nos sirve de caja de resonancia de nuestros asuntos propios, creando una sinergia enriquecedora. De lo grupal, se aborda lo particular, y con ello aprendemos tanto a ser terapeuta individual como grupal.
¿Qué inquietudes acompañan a formarse en Gestalt?
Sobre todo adquirir un nivel de conciencia del que obtener respuestas para sanarse de dolores y conflictos que llevan un largo tiempo acompañándote. Este nivel de conciencia será gratificante a nivel personal. Si ejerces a nivel profesional, experimentarás que tu mirada hacia tu cliente es más integrada y que posees más conocimiento respecto a la teoría y técnicas para utilizar en tus sesiones.
¿Cuál es la utilidad del espacio de supervisión para el terapeuta?
Sentirse acompañado en su aprendizaje, en su duda, en su angustia, aprovechándola a su favor en su crecimiento como terapeuta. La figura del supervisor significara contar con un maestro, alguien con mucha más experiencia que tú en tu comienzo y que sabrá darte orientación en tus propios casos.
¿En que radica la importancia del trabajo personal del terapeuta?
Lo que nos hace únicos a las personas, es la capacidad exclusiva de sentir las diferentes emociones, alegría, dolor, rabia, etc., de una determinada forma. Como
terapeutas hemos de enriquecernos y trabajar nuestras emociones propias, resolver nuestras pérdidas, superar nuestras limitaciones. Tener elaborado en sí mismo estos
aspectos, nos da la capacidad de aproximarnos a lo que le sucede a nuestros pacientes, ayudándoles a resolver lo propio.
¿Y cuando termine la formación que?
Si ya eres psicólogo, durante el proceso habrás ido tomando la actitud y técnicas gestálticas y tus sesiones se habrán impregnado de la presencia de esta disciplina. En cualquier otra profesión que ejerzas será de gran aportación la integración de todo lo vivido durante tu formación. De no haber ejercido nunca como terapeuta y ser tu deseo, este es un buen paso de inicio para comenzar, pero sin duda has de seguir construyendo interrogándote para seguir aprendiendo.
¿Porque elegir la Gestalt y no otra corriente?
A diferencia de otras corrientes, los gestálticos decimos: – el instrumento es el terapeuta –
A mayor nivel de conciencia y desarrollo del terapeuta, mejor será en su labor. Esta metodología a diferencia de otras corrientes en las que aprendes pautas y técnicas para aplicar, en primer lugar, cada pauta y técnica se ha de experimentar en uno mismo, y como consecuencia de ello, tu experiencia al aplicarla a tu paciente tomara consistencia, ya que previamente está integrado en ti. De forma que al finalizar la formación, la primera cuestión que has concluido ha sido tu propio proceso personal, lo segundo, es que estas mismas técnicas y herramientas sabrás utilizarlas con destreza en tus sesiones con tus pacientes.