ALIMENTACIÓN INTUITIVA
Solo cuando prometes solemnemente descartar las dietas y sustituirlas por el compromiso comer de forma intuitiva, consigues liberarte de la obsesión por la comida.
PRINCIPIO 1. Rechazar la mentalidad de dieta
Deshazte de métodos y tendencias sobre alimentación con las que ya hayas fracasado. Si permites que persista una pequeña esperanza de que a la vuelta de la esquina un nuevo plan te hará encontrar mejores resultados, no podrás ser libre para redescubrir la alimentación intuitiva.
PRINCIPIO 2. Honrar la sensación de hambre
Si no te encargas de nutrirte con lo que tu cuerpo necesita, puede que te provoques el impulso contrario, que se trata del impulso primario de comer en exceso. Una vez estas en el punto de tener hambre excesiva, todas las intenciones de alimentarte de forma consciente se vuelven efímeras.
PRINCIPIO 3. Hacer las paces con la comida
Concédete permiso para comer. Decirte constantemente a ti mismo que no puedes o que no deberías consumir tal alimento puede llevarte a un sentimiento de privación que derive en antojos incontrolables y a frecuentes atracones. Cuando te rindes a esos alimentos prohibidos, suele ocasionar lo que llamamos el fenómeno de última cena y una gran culpa.
PRINCIPIO 4. Desafiar a la policía alimentaria
Di un rotundo no a los pensamientos que te dicen que eres bueno por consumir una cantidad mínima de calorías. La policía alimentaria controla las reglas irracionales creadas por la cultura de la dieta.
PRINCIPIO 5. Descubrir el factor de satisfacción
El placer es uno de los objetivos de la vida saludable; cuando comes lo que quieres en un ambiente grato, el placer que obtienes es el motivo que te ayuda a sentirte satisfecho y contento.
PRINCIPIO 6. Percibir la sensación de saciedad
Para honrar la sensación de saciedad has de confiar en que te permitirás consumir los alimentos que desees. Es importante prestar atención a percibir las señales de tu cuerpo que te indican que ya no tienes hambre. Haz pausas dónde te preguntes cuál es tu nivel de hambre en ese momento.
PRINCIPIO 7. Afrontar las emociones con amabilidad
La restricción de alimentos puede provocar una pérdida de control tanto en la alimentación física como mental en forma de alimentación emocional. Busca formas de reconfortarte, de cuidarte y solucionar tus problemas que no pase una inadecuada forma de alimentarte. El aburrimiento, la soledad, la ira son emociones incómodas; cada una tiene su causa y alivio, pero la comida no solucionara ninguno de estos sentimientos.
PRINCIPIO 8. Respetar el cuerpo
Todos los cuerpos merecen consideración, respeta tu constitución genética y deja de tener expectativas no reales. Deja de compararte y ocúpate de cuidarte.
PRINCIPIO 9. El movimiento: sentir la diferencia
Olvida el ejercicio militante. Simplemente actívate y descubre la diferencia. Enfócate en cómo te sirve mover el cuerpo en vez de enfocarte en quemar calorías.
PRINCIPIO 10. Honrar la salud: la nutrición moderada
Elige alimentos que respeten tu salud y tus papilas gustativas. No existe una forma perfecta de comer para estar sano. Lo importante es lo que comes a lo largo del tiempo. El progreso es lo que cuenta, no la perfección.
Irene Poza. Psicóloga
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